viernes, 27 de noviembre de 2015

Tabaquismo
Nombre masculino
Intoxicación aguda o crónica producida por el consumo abusivo de tabaco.
"el tabaquismo crónico se caracteriza por trastornos respiratorios, digestivos, circulatorios y por su capacidad cancerígena"

Conceptualización,
Se entiende por tabaquismo al consumo desmedido de este con graves consecuencias a la salud por la acción de la nicotina en nuestro cuerpo acompañada de muchos otras substancias cancerígenas y venenosas, la nicotina es un alcaloide que en pequeñas dosis resulta un estimulante del sistema nervioso central.
El fumador experimenta que al primer cigarrillo le produce una sensación gratificante en el organismo pero al mismo tiempo produce tos y manchas en los dientes, para los que no tienen arraigado la adicción a este mal es probable que el primero sea una cadena que no tendrá fin hasta ocasionar algún cambio negativo en nuestro cuerpo o en definitiva la muerte si no se toma conciencia de lo grave que es esta práctica.
Entendemos por adicto cuando la persona que esta habituada al consumo de este producto siente una necesidad que no puede evitar de llevarse a la boca un cigarro y en definitiva no podrá parar este mal hábito de consumo, la adicción se presenta sin darse cuenta el individuo.
Cuando el cigarro es encendido y llega inmediatamente a los pulmones el humo venenoso que contiene a parte el tabaco otras substancias para ad-herirle sabor y textura que el fumador reconoce al elegir una serie de marcas que las compañas publicitarias le hacen creer al consumidor que ese es su estilo.
Cuando el humo nocivo penetra en los pulmones los daña inmediatamente ocasionando en una gran cantidad de casos cáncer de pulmón, boca faringe y enfermedades respiratorias como el conocido EPOC que tantas muertes causa a nivel mundial, así como problemas cardíacos.
Lo raro de todo esto es ¿porque los gobiernos del mundo a pesar de las muertes comprobadas de su uso,  el consumo es legal?
Pero lo más nocivo de esta práctica es que no solo afecta al fumador esta práctica sino a todo aquel que está presente a la hora de fumar, estudios han demostrado que el humo que produce un fumador es mucho más toxico.
Cuando una mujer se encuentra embarazada es muy peligroso para el feto cuando la madre es fumadora ya que ocasiona daños cardíacos, pulmonares, nutricionales y al sistema nervioso.



Etiología.
Muchas de las investigaciones sobre la etología del tabaquismo,  distinguen entre probar, experimentar y fumar habitualmente.
Para  precisar  la etología del tabaquismo, no debemos olvidar el carácter adictivo del tabaco, y las cuestiones  actitudinales, conductuales y psicosociales.
Diversos estudios que indican que más del 28 % de los jóvenes pasan de la primera etapa (preparación-no fumadores) a la tercera (experimentación) en menos de 3 años, y casi el 11 % de los que declaran no fumar y el 30 % de los que se encuentran en la etapa de experimentación se convierten en fumadores habituales en ese mismo período de tiempo.
En diversos estudios se  ha comprobado que los amigos tienen un papel muy importante en la progresión de una etapa a otra, lo que puede darnos una  variable importante en la estimación de quién llegará a convertirse en fumador habitual.
También algunos estudios han identificado diferentes factores de riesgo relacionados con la iniciación y el uso de tabaco en jóvenes, entre ellos sensación de relajación y placer, imagen personal, curiosidad, estrés, aburrimiento y falta de interés, auto afirmación, rebeldía y presión de amigos. El papel de los padres es también muy importante.
Otro factor que debemos de tomar en cuenta es que hay condicionantes genéticos que nos inclinan más hacia esta práctica.
Existen evidencias que indican que la exposición prenatal y durante los primeros años de vida al humo de tabaco ambiental sería un factor predisponen te para la iniciación al hábito durante la adolescencia. En la exposición prenatal al tabaco, la neurotoxicidad por nicotina produce alteración celular que persiste hasta la adolescencia. Esto deja una huella  en el cerebro que favorece el tabaquismo en el niño al inhalar por sí mismo nicotina, lo que puede desarrollar el hábito con mayor frecuencia que en los hijos de madres no fumadoras.






Epidemiología y clasificación del tema.
El aumento en la variación en el panorama epidemiológico de las enfermedades no transmisibles y lesiones, es de tal magnitud, que se les asume como patologías emergentes.

El tabaquismo se ubica dentro de las patologías que requieren atención emergente, ha sido considerado incluso por algunos especialistas como la epidemia del siglo y los datos demuestran que existe una fuerte vinculación con los principales indicadores de morbilidad y mortalidad.

Hoy en día la evidencia científica generada en los últimos 40 años demuestra que el tabaco es uno de  los productos más nocivos para la salud, y a pesar de que en la actualidad se conocen los daños causados por fumar, el tabaquismo continúa en ascenso, y las tendencias de su creciente consumo son alarmantes  especialmente en los países en desarrollo; por las proporciones alcanzadas se le considera una epidemia universal.
 En todo el mundo hay miles de fumadores unos 1100 millones y la cifra va en aumento, aproximadamente cada 8 segundos el tabaco cobra una nueva vida en todo el mundo.
El aumento en el consumo por parte de niños y adolescentes es alarmante las cifras indican que de cada 1000 jóvenes 250 morirán por el consumo de tabaco.
El nivel de preparación y el tabaquismo guarda una importante relación a menos preparación escolar hay mayor probabilidades de ser fumador, la edad de inicio en este hábito es cada vez menor.

Estos datos apoyan la teoría de que la epidemia del tabaquismo ha llegado a su máximo punto en países desarrollados, pero se encuentra en ascenso en los países en desarrollo. Datos  de la OMS indican que, si continúa el consumo actual, para el año 2020 habrá 10 millones de muertes anuales por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, de las cuales siete de cada diez ocurrirán en países en desarrollo. Además, los países en desarrollo, como México, serán el blanco de las estrategias de las industrias tabacaleras transnacionales en busca de nuevos mercados de potenciales fumadores, en particular, entre los jóvenes y las mujeres

El concepto de tabaquismo ha evolucionado mucho en las últimas décadas. De” hábito” en los años 60, el consumo pasó a ser considerado como dependencia en los 70, a mediados de los 80 el tabaquismo fue enunciado como una adicción y durante los años 90 se instauró la clínica del fumador.
El consumo de tabaco desmedido puede ser causado por una adicción a la draga llamada nicotina y no es huroneo pensar que el fumador es en potencia un drogadicto.
 (1) Los cigarrillos y otras formas de tabaco son adictivos; (2) La nicotina es la droga del tabaco que crea adicción; (3) Los procesos farmacológicos y conductuales que determinan la adicción son similares a aquellos que determinan la adicción a drogas tales como la heroína y cocaína


La Asociación Americana de Psiquiatría con el Manual de Estadística y Diagnóstico de Trastornos Mentales DSM-III (1980) y el DSM-III-R (1987) y la Organización Mundial de la Salud, por medio de la Clasificación Internacional de Enfermedades, (CIE-10), 10a edición, publicado en 1992, también aportaron sus conclusiones sobre la dependencia a la nicotina y reconocieron públicamente los efectos adictivos de esta sustancia. La Asociación Médica Internacional de la Adicción publicó un informe similar en el que identificaba la nicotina como una sustancia psi-coactiva y la dependencia nicotina como la más común en los Estados Unidos.



Tipos de evaluación.
La evaluación del paciente en este caso por el fumador, se tiene que indagar mediante una entrevista que logre arrojar una adecuada evaluación conductual para una adecuado tratamiento del trastorno.
Al utilizar los criterios establecidos por el l DSM-IV-TR (American Psychiatric Association, 2000). Se logra determinar si existe un trastorno que le esté causando un daño en su conducta.
.
Esto permitirá   poder predecir el curso del trastorno. Disponiendo  de adecuados recursos psicológicos (disponer de buenas habilidades sociales; saber solucionar adecuadamente los problemas; alta autoestima e inteligencia, etc.)
A diferencia de otros trastornos, en las personas con dependencia de la nicotina, en muchas ocasiones su estado de salud, o la enfermedad que padece, viene dada por su consumo de tabaco. Estas enfermedades o problemas físicos pueden ser de gran ayuda para incrementar su motivación para el tratamiento o, a la inversa, un problema importante por su alto nivel de dependencia de la nicotina. En todo caso, en ocasiones puede ser necesaria una intervención amplia en el individuo, bien sea de tipo médica, psicológica o combinada.
Todo lo anterior permite llegar a la valoración global del individuo, como así hacen específicamente distintos cuestionarios y entrevistas. Y, con la misma, podremos establecer un pronóstico de qué poder  hacer, como poder hacer y cuándo se puede hacer.
De este modo, la evaluación se convierte en un punto esencial de todo el proceso terapéutico. Es imprescindible una buena evaluación, para poder aplicar un tratamiento adecuado, el cual se tiene que fundamentar en la evidencia científica
(Labrador, Echeburúa y Becoña, 1998;Secades y Fernández, 2001).


 Estrategias y programas de intervención.
Las estrategias para la prevención de esta adicción están implementadas en el sector salud que diseña programas que son llevados a las escuelas que al hacer hincapié en alumnos de edades tempranas se logra frenar esta práctica cuando son adultos, si se implementa adecuadamente estas pláticas.

Otra campaña que ha dado resultado en México es que se advierta de manera ilustrativa lo que el cigarro puede causar en nuestro organismo y que la publicidad en la caja este diseñada de tal forma que no corre una falsa ilusión en el consumido sino más bien sirva de advertencia para saber qué es lo que pasara si se insiste o se cae en esa práctica.